Tenlo claro...

La primera vez que traspasó aquella puerta, apenas alcanzaba el metro de estatura. Se quedó en el umbral, aspirando el aroma a magia que desprendía aquella casa. La estancia estaba en penumbra, iluminada únicamente con una luz anaranjada, sin fuente aparente, al menos el pequeño no sabía de donde venía.

Se atrevió a dar un paso, y otro, y otro, hasta que se encontró de frente con la dueña de la casa, la que lo había traído hasta allí. Estás entrando en el mundo de los sueños, el mundo de las artes, el mundo ficticio y real, donde todo se rompe y se regenera de nuevo. Donde todo es infinito. Ahora te lo creerás, pero cuando seas mayor, empezarás a ponerlo en duda.

Los adultos son todos unos ilusos, no saben que la literatura lleva a todas partes.

sábado, 13 de abril de 2013

Ironía

Ahora que he descubierto que efectivamente aquí no hay nada que pueda pararme a expresarme, he decidido utilizarlo temporalmente como un diario.

Desde que he vuelto a verme sola en el mundo, como un pequeño brillito que se ha debilitado porque el que lo seguía ya no está, no lo había pasado tan mal como ayer. Ayer fue un día horrible.

Lo había visto antes, sabiendo que ya no me pertenecía, que se había ido con otra... Un par de segundos, no mucho más que ayer... Pero ayer no me acerqué. Él me buscó, ambos estábamos bien.

Yo todavía no tengo claro si lo estoy o no lo estoy.

Es irónico que ahora mismo, me dé cuenta de que nunca le había dedicado una entrada... Nunca le había permitido dejar que mis sentimientos fluyeran por mis palabras escritas aquí. Y ahora mismo eso es precisamente lo que estoy haciendo.

Estoy cansada de escuchar a todo el mundo que me dice, que por alejarse de mi lado, por irse con otra persona, nunca volverá. También estoy cansada de escuchar a todos los que dicen que soy ingenua y que me quiero poco, por querer mantenerlo a mi lado como amigo.

¿Cuál es el problema? En serio, sociedad, cuál es el problema de que dos personas decidan seguirse queriendo como amigos después de esto...

A nadie le tratan como se merece, ni siquiera a los que son buenas personas por completo. ¿Por qué se supone que yo tengo que ser igual que el resto? ¿Por qué nadie tiene a bien perdonar los rotos?

Yo le quiero... Sé que le quiero, y sé que estábamos muy bien el uno al lado del otro. Seguir hablando sólo me hacía ver que quizás sería igual que conmigo.

Ayer fue un día horrible. Ayer se enfadó, se preocupó por mi estado, estuvo encima... Me trató como si fuera un padre decepcionado. Decepcionado, o sinceramente como me reconoció... Preocupado de que lo que había hecho por la noche era por él...

Sinceramente, cuando la respuesta a como ser o como comportarme no viene a mi... Leo libros, leo opiniones. Me recompuse con cierta rapidez, y jugué la carta de decirle que no quería explicar nada en la noche... Me dijo que si era algo relacionado con juntarme con alguien... Que él se alegraría, que ya no estábamos juntos...

No sé como transmitir lo que está ocurriendo conmigo. Yo lo vi, lo vi como yo era, y como es él. Lo vi y no puedo definir a una persona que encaje mejor conmigo como yo... No la conozco, y no quiero empezar una relación en la que empiece a comparar todo con él. La otra persona no lo merecía.

Me reparaba hablando con él, hasta que ayer no me vi capaz de acercarme a hablar con él. Estaba a dos metros, y no negaría que nuestros amigos en común decidieron por nosotros no hablar, y nos separaron con rapidez.

Quiso darme explicaciones, me dijo que no me había visto, me dijo que por qué no me acerqué. Terminamos decidiendo que no hablaríamos en un tiempo. Que era lo mejor, que se preocupaba más por mí que por ella.
Que aquello no podía ser... Que ella se terminaba cansando y que no era lo que él quería.

¿Mi cerebro debería intentar ubicar todas estas frases en algún punto de los sentimientos? Sé que le importo, pero no sé cómo le importo... Con que le importe, para mí es suficiente...

Una hora después volvió a mensajearme para decirme que mejor seguíamos hablando. Tuve la experiencia más horrible del mundo.

Le empujé. Le empujé fuera de mi móvil, le empujé a su vida nueva. Lo he empujado a estar con otra persona, que no sé si le hará daño o le hará más feliz. Lo empujé a decirle que mejor que no habláramos.

Está confuso... Su cabeza no tiene claro nada... Cambia de idea con respecto a tenerme a su lado o no. Y si no me echa de menos nunca sabrá si quiere tenerme a mi lado o no.

Sé que en el fondo lo único que quiero es que pase una semana, pasen dos, o pase un mes, y que todo el mundo que en su día me dijo "no volverá", "no deberías ser su amiga", "no deberías volver con él porque se fue con otra persona", se tengan que tragar sus palabras... Tengan que tragar que vuelva, que se haya dado cuenta de que soy yo, y ya está, y nadie más.... En el fondo lo único que quiero, es que él sea quien yo creo que es, la persona con la que me gustaría vivir...

viernes, 12 de abril de 2013

Alcohol

La embriaguez a veces arregla muchas cosas, aunque la gran mayoría las estropea.

Yo tiendo a mostrarme con cierto misterio cuando conozco a alguien ¿A quién no le gusta hacer el rol de interesante cuando hay alguien nuevo a quien conocer?

Basta una noche de desmadre para que todo esto se vaya al garete.

Tenía varios conocidos de vista en aquella fiesta, y siempre había querido hablar con todos ellos. Desde luego mi cerebro no filtró como era debido y decidió que de perdidos al río.

Sinceramente, desde mi punto de vista no puedo atisbar como se me veía desde fuera (esa es la gracia del asunto). Pero no creo que haya sonado muy halagadora.

En fin, todo esto tiene el motivo de pedir disculpas/resarcirme de alguna cosa. Principalmente de haber bebido tanto alcohol en aquella noche.

Conocí gente, que espero que lo recuerden como una anécdota simpática en un momento no muy acertado de mi vida para abandonarme a la bebida de esa manera. Y sinceramente, todo lo que dije lo dije con sinceridad, con mucha sinceridad.

Si es cierto que sigo un blog, el cual disfruto enormemente leyendo, y que me hace ver que en mi juventud no solo hay la gente que no da un pimiento por opiniones, por lo que pasa dentro del cuerpo humano, por lo que sucede dentro de la mente, como lo sugestiona todo, como algo tan pequeño en comparación con el mundo que nos rodea puede registrar todo. Como una sola lectura te puede transportar a miles de sitios distintos.... En definitiva, sigo un blog que a través de la lectura me evoca sensaciones y maneras de ver la vida. Y relatos. Justamente como este blog es. Y felicidades al autor, que anoche lo encontré un tanto de casualidad entre la marea de gente, y me resultó muy singular conocerle allí.

Si es cierto que tenía curiosidad por conocer a más gente, porque es un tanto complicado cuando sabes quien es alguien de vista, pero no lo conoces de nada, y si te dirige la palabra resulta raro saber como se llama y ahogar el nombre... Por si acaso parece raro.

También es cierto que estuve haciendo ilustraciones para el blog, y que HAY GENTE MUY COMPLICADA DE DIBUJAR, y que quedan como un action man y después hay que borrar y hacer otra vez. (no ofense) Y eso de que te dibujen por fotos sin que tu lo sepas, a veces asusta un poco.

Y también es cierto que me intriga mucho el mundo de Japón, pero que una no quiere comportarse como una friki, porque los fanatismos muchas veces son un extremo, y los extremos nunca son buenos. Así que bueno, si, me gusta Japón, indago mucho, intento hacer comida japonesa y me frustro porque no me sale y aprendo japonés de forma autodidacta, ahí lo dejo.

Recuerdo haberme sentido en un momento de la noche totalmente confundida, y ver como a mi alrededor todo el mundo tenía el mismo o peor estado de embriaguez que yo, y querer buscar a alguien que no lo estuviera tanto. Medianamente lo encontré, o lo que el alcohol me permitía ver de él. Si me quise aferrar de más a la esperanza de que se me pasara el alcohol, y probablemente hubiera sido demasiado efusiva, también mis disculpas.

Y más o menos ese es el resumen de la noche de ayer... Un montón de formas de pensar sobre gente que quería conocer, y que finalmente terminé conociendo en un punto muy complicado de la noche, y de mi vida.

Hay algo más, ya para volver a lo personal e íntimo....

Como sé que es complicado que esto sea leído por esta última persona a la que va dirigido, creo que podré expresarme con total libertad y sin miedo a dobles sentidos.

No hace mucho que dejó de formar parte activa de mi vida, porque él lo decidió así. Y la palabra amigo, me llena, aunque no estoy viendo que sus actos correspondan a ella. Más bien es un amigo bastante especial.

Tengo la esperanza de que en algún punto de la historia pueda volver a su lado, al cien por cien. Pero de momento controlo mis emociones y mis sentimientos, aletargados, cosa que por otra parte no me ha resultado difícil... Y eso me confunde.

¿Por qué lo dejaste ir Audrey? Porque le quiero. Y sé que si él me dice que no puede ser feliz a mi lado, porque ya no siente lo mismo, sinceramente, si quieres a alguien lo mejor que puedes hacer es dejarlo marchar. Probablemente lo haya meditado mucho, probablemente no. O probablemente en un par de meses vuelva después de un mar de dudas habiendo decidido que se equivocó al elegir.

Pero ayer estaba preocupado por mi, porque salía, preocupado de si me pasaba algo, preocupado de no tengo muy claro el que...

Y me pasé bebiendo, y hablé de más. Ahora mismo siento que le he fallado, porque debería dejarlo tranquilo con su vida, dejar que repose de mi, y dejar que se preocupe menos. Pero ayer no lo hice. Y no me siento con fuerzas mentales para decirle que he sido egoísta, por eso lo escribo aquí, donde sé que no lo verá, pero donde sé que me desahogo. Y es en estos momentos en los que echo de menos poder decirle que lo siento mucho, y que bajaré a la estación a verlo como todas las semanas, y que ahí se nos pasará todo.

Porque no será así, no habrá mas estación, no habrá mas viajes. No habrá mas conversaciones hasta las tantas, ni palabras de cariño más allá de la amistad. No por ahora.

De hecho, ahora mismo no podría haber ni palabras, porque el nudo de la garganta me lo impide.

Y así es el alcohol, te hace débil, y franqueable. Y hacerte sentir idiota al día siguiente.